Milei: El rey de los vetos, en el reino de la motosierra

  • Publicado el 04/08/2025

Javier Milei lo hizo: al filo del límite legal, firmó los vetos para dejar sin vigencia la ley de emergencia en discapacidad y las leyes vinculadas a las mejoras para los jubilados. Este lunes se vencían los diez días hábiles para rechazar las normas aprobadas por los legisladores a principios de julio y, durante el fin de semana, el Presidente rubricó los vetos que saldrán publicados en el Boletín Oficial. La estrategia del Gobierno fue dejar pasar los días para darle tiempo a los alfiles de la Casa Rosada y del Congreso para negociar y bloquear los dos tercios que necesita la oposición para rechazarlos. Aún lo siguen haciendo, tanto con los gobernadores como con los distintos bloques parlamentarios. En la Libertad Avanza, en tanto, confían que "hay buenas expectativas", con respecto a los votos para sostener la decisión de Milei. Solo habrá que esperar a que suene la campanilla en el recinto para poder ponerle cara a los nuevos "héroes" que terminarán acordando con el oficialismo. Las organizaciones y colectivos que defienden las leyes que los protegen salieron a criticar la decisión presidencial. 

"Cada gobernador tiene sus herramientas para hacernos daño, pero estamos muy cerca de garantizar que los vetos queden firmes", dicen quienes están al tanto de las negociaciones desde el Gobierno. El viernes, el gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro se reunió con representantes de la Casa Rosada y también lo hizo el chaqueño Leandro Zdero, con quién Karina Milei hizo una alianza en su provincia para las elecciones locales. "No queremos adelantar una victoria, pero venimos bien", confían en Balcarce 50. 

Sucede que, más allá de la discusión electoral de octubre para la que varios gobernadores quieren negociar con LLA, hay otros mandatarios provinciales que están buscando tomar deuda en sus provincias y, para eso, necesitan el permiso de nación. "Tenemos herramientas para negociar con cada uno", aseguran confiados en el oficialismo, sin muchos rodeos. 

La semana pasada, además, un grupo de legisladores radicales, más conocidos como "los radicales con peluca", se sumaron a La Libertad Avanza en un interbloque dentro de la Cámara Baja. Ellos son parte de los diputados que le permitieron a Milei blindar los vetos cuando también fue en contra de una ley que mejoraba los haberes jubilatorios el año pasado. En este momento, si se suma al bloque oficialista el del MID que responde a Oscar Zago y a los del PRO liderados por Cristian Ritondo, más este grupo de radicales, Milei ya tendría 84 votos asegurados para sostener sus vetos en Diputados. La oposición necesitaría tener dos tercios de los presentes, por eso también serán clave las ausencias. 

Hace unos días desde el entorno de Milei creían que ya contaban con los votos necesarios para voltear la ley de mejora de las jubilaciones y el regreso de la moratoria, pero no estaban seguros de qué ocurriría con la emergencia en discapacidad. Sucede que implicaba menos dinero que las otras leyes y muchos diputados no estaban dispuestos a sostener el veto del Presidente. Sin embargo, por estas horas en el gobierno también son optimistas con poder dejar sin efecto esa ley. 

"Una situación crítica que se agrava todos los días"

La ley de aumento para los jubilados, entre otras cosas, establece un aumento único de 7,2 por ciento aplicable a todas las jubilaciones y también un aumento del bono que de 70 mil pasaría a 110 mil. La emergencia en discapacidad, en tanto, establece una serie de medidas orientadas a garantizar el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad y tendría un impacto fiscal que rondaría entre el 0,22% y 0,42% del PBI.

Ana Dones, representante de la Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad, explicó que la emergencia en discapacidad "no puede esperar porque las personas con discapacidad y sus familias atraviesan una situación crítica que se agrava día a día". 

Además, indicó: "Están las pensiones suspendidas, no hay posibilidades de sostener tratamientos por la falta de pagos, ni tampoco la posibilidad de transporte porque pagan de nafta 500 pesos el kilómetro, lo cuál hace que todo esto sea incompatible con que las personas con discapacidad puedan tener una mínima vida". El veto de Milei, añadió, Dones "profundiza la emergencia y hace que no haya ninguna posibilidad de que las personas con discapacidad puedan tener una vida digna con los tratamientos y las prestaciones que necesitan". 

Por otro lado, recordó que es tal la gravedad de la situación que el comité de la convención sobre los derechos de las personas con discapacidad se adhirió al reclamo y envió una nota al gobierno diciendo la necesidad de que se sostenga la ley de emergencia para que el país pueda adecuarse a los compromisos internacionales. "Nos están desfinanciando sin darnos ninguna respuesta", finalizó.

Desde el sector de jubilados, Eugenio Semino, referente y defensor de la tercera edad, sostuvo: "Los jubilados no dan más con 300.000 pesos. Lo que se necesita es una emergencia alimentaria, sanitaria y habitacional. Esto no da para más”. En esa línea sumó: “Entramos en otro período: ahora viene la pelea por si se logra o no rechazar el veto con los dos tercios, pero mientras tanto el jubilado se sigue muriendo de hambre. Y este es el tema que no se toma en su real dimensión”.

El camino del rechazo

El miércoles la oposición hizo un pedido de sesión para tratar otros dos temas centrales: la emergencia en la salud pediátrica y la ley de financiamiento universitario. En esa sesión, adelantaron, no se tratarán los vetos de Milei.

Una vez firmados los vetos y publicados en el BO este lunes, las leyes volverán al Poder Legislativo que puede aceptar el rechazo presidencial o insistir en la sanción. Si la Cámara de origen, en este caso Diputados, después de discutirlo una vez más, cuenta con dos tercios de los votos para imponer su criterio inicial, el texto pasará a la cámara de revisión, es decir, al Senado. 

Si ambas Cámaras logran insistir por igual mayoría, la ley se promulgaría aunque el presidente no esté de acuerdo. Sin embargo, si al menos una no lo consigue, el veto del presidente se mantendrá y el proyecto no podrá volver a ser tratado en las sesiones de este año. Según explica el artículo 83 de la Constitución Nacional las votaciones de ambas Cámaras deberán ser nominales, es decir, por sí o por no.

 

 

Nota Página 12-Por Melisa Molina